Tucson Mineral and Fossil Show (01 to 14 de February 2016)
Tucson es un destino obligado para los amantes de los minerales, fósiles y piedras preciosas, ya que en invierno de cada año la ciudad se transforma, cientos, yo diría hasta miles de tiendas de los más diversos lugares del mundo invaden la ciudad. Durante aproximadamente un mes todo gira en torno a los minerales, gran […]
Tucson es un destino obligado para los amantes de los minerales, fósiles y piedras preciosas, ya que en invierno de cada año la ciudad se transforma, cientos, yo diría hasta miles de tiendas de los más diversos lugares del mundo invaden la ciudad. Durante aproximadamente un mes todo gira en torno a los minerales, gran parte de los hoteles convierten sus habitaciones en tiendas temáticas, las calles y sitios eriazos se llenan de carpas o tiendas y en diferentes lugares de la ciudad se presentan shows con hermosas colecciones.
Yo me hospede durante dos semanas en el Hotel Tucson City Center, conocido popularmente como Inn Suites, ya que este hotel está reconocido mayormente con minerales en bruto para coleccionismo, no con gemas, ni con fósiles como en otros hoteles. En este hotel coexisten desde los grandes y más reconocidos vendedores de minerales, hasta lo más pequeños, por lo cual se pueden comprar muestras desde un par de dólares hasta miles de ellos, pero lo mejor es que siempre se puede pedir una buena rebaja, independiente del precio de la muestra. A la cabeza me vienen recuerdos de las hermosas Calcitas de la Mina Elmwood, las impresionantes Cupritas de la Mina Rubtsovskoe en Siberia, las reconocidas Crocoitas de la Mina Adelaida, las siempre estéticas Piritas de Navajún, como también reconocidos vendedores como Jordi Fabre, Spirifer Minerals, Collector’s Edge, Crystal Classics, etc.
Para algunos puede parecer rutinario, pero para los que nos gustan los minerales el día se pasan recorriendo los cientos de tiendas, siempre pensando “como luciría esta muestra en mi colección”, a cada momento comparando calidad versus precios, nunca debe comprar sin comparar, ya que puede encontrar dos muestras similares en calidad con precios impresionantemente distintos. El desayudo de cada día y la cena son importantes, ya que para el almuerzo solo basta con alguna hamburguesa, hot dog para reponer fuerzas. Para cenar hay muy buenas alternativas en Tucson, por ejemplo para los que disfrutan la carne en el centro esta “HUB Restaurant & Ice Creamery” o bien a unos 20 minutos en automóvil está un pequeño pueblo ambientado en el lejano oeste, que cuenta con un muy buen restaurant “Pinnacle Peak Steakhouse and Saloon”. En el centro de la ciudad hay un sin número de restaurantes, a los que gustan de comida Japonesa les recomiendo “OBON Sushi Bar Ramen”, las sopas son muy agradables. También en el centro hay un clásico Hotel, restaurant y café “The Hotel Congress”, con una carta muy diversa y muy buen ambiente. Por último, a un par de cuadras del Hotel, con el clásico ambiente mexicano, esta “Marisos Chihuahua”, en donde se puede disfrutar de pescados y mariscos a precios muy convenientes.
Uno no puede venir a Tucson sin visitar el Show principal de minerales, la entrada al Tucson Convention Center es de 13 dólares por persona y lo único que puedo decir es que es impresionante, no creo que sea prudente intentar describir la calidad de las muestras que se pueden observar, solo voy a decir que ya me estoy preparando para regresar el próximo año.